sábado, 6 de julio de 2013

Iván Uriarte; No hay ciudades en esta ruta


Iván Uriarte

Jinotega, Nicaragua. 1942. Poeta, narrador y crítico literario. Es Doctor en Derecho de la Universidad Centroamericana y en Literatura por la Universidad de Pittsburgh.
De 1970 a 1976 residió en Europa, principalmente en Francia, donde aprendió su lengua y consumió mucha literatura francesa y recibió cursos  de narratología con Gerald Genette y de Historia de América con Ruggiero Romano.
Lector latinoamericano en la Universidad de Niza, durante cuatro años.
En 1977, se inscribió en la Universidad de Pittsburgh, Pennsylvania, donde obtuvo maestría y  su respectivo doctorado en Literatura Hispanoamericana siglo XX (1980), con la tesis La poesía de Ernesto Cardenal en el proceso social centroamericano, publicada por el Centro Nicaragüense de  Escritores, Managua, Anamá ediciones, 2000. 
En 1999, obtuvo el Premio Nacional de Poesía “Rubén Darío”, convocado por el Instituto Nicaragüense de Cultura, con Los bordes profundos.
En 2001, residió como becario en Madrid haciendo estudios sobre Don Quijote, y en 2004 fue invitado a la Feria del Libro Español, en Barcelona, dedicada a Centroamérica.
En noviembre del 2007 participó como ponente en el XVIII Coloquio Cervantino Internacional celebrado en la ciudad de Guanajuato, México.
En l999 inició en la Universidad de Ingeniería un Taller de Escritura Creativa, que se ha mantenido vigente.
Es autor de una radio-novela sobre la vida y obra de Rubén Darío, El vuelo del cisne, la cual fue ampliamente difundida por radio Sandino, de agosto a octubre del 2008.


La puerta anterior
Instalada antes del tiempo se recuadraba su imagen a la salida del paraíso, aguardando a la pareja solitaria que la transgredió con su sombra rumbo al desconocido mundo. Inalterable se ha mantenido, crecida desmesuradamente ante nuestros ojos.
Buscando la puerta de entrada al recinto ancestral se nos pasa la vida sin nunca llegar a es altura, resplandecida, llameante desde antaño. Frente al agonizante mundo donde las especies han perdido su ciclo y los árboles cuelgan de sus raíces como hendiduras en el cielo, yacemos esperando. Damos vueltas, en revoloteo de aves frente al ausente nido. Memorial tiempo incinera nuestros pasos alrededor sin encontrar ni señales, ni signos. La primera puerta, nos decimos, ha de ser la última, que es, que será esa que precisamente tendremos que franquear en el aciago, inesperado día de nuestra condena.

No hay ciudades en esta ruta
No hay ciudades en esta ruta
ni calles ni direcciones
ni domicilio alguno
todo lo llevas pintado en el rostro
todo lo arrastras en tu cuerpo.
El túnel no termina
y debes continuar
hasta desfallecer
y dejar a tus tranquilos sucesores
la remota posibilidad de recogerte
para que así continúen con la inútil
pesada carga
que ya precisamente eres.

Anomia
El olvido es apenas noche estacionada
del viaje nunca realizado
que se detiene precisamente donde no estamos.
La espera, lugar ignorado
es nuestro único posible ámbito
realización aguardada
sala final atestada de prostitutas ciegas
que tanteando los bordillos de nuestros pantalones
se postran
nos tocan
sabiendo labialmente
la longitud de nuestros penes
que arrebatados se erectan en batalla campal

de reatas (rescatándonos del olvido).

No hay comentarios: